La paja en la rubia ajena

Pamela Díaz, personaje de la farándula chilena odiaba a las rubias, las considera huecas, tontas. Que si sobresalían era nada más porque eran rubias. Criticaba a los chilenos por preferir a las mujeres por su color de pelo y piel y no valorar a las “morenitas”. Pero como por la boca muere el pez, se cansó de ser morena y pasó a ser otra más del montón, como dice el refrán “no escupas al cielo que te puede caer en la cara”.

Esta banalidad farandulera se puede asociar con la política contingente local, basta escuchar Radio Neura, que como Pamela Díaz sólo ven la paja en el ojo ajeno. La historia, los hechos, las irregularidades no se cambian con cambiarse de línea de fuego. Es como las rubias taxi, por arriba de amarillas pero por abajo negras. ¿Qué divertida es la vida, verdad?