El 10 de enero se detuvo el tiempo, el piano dejó de sonar y nos acordamos cómo fuiste llenando el pentagrama de tu vida, mujer enamorada del amor, del arte y de vivir la vida.
Como siempre, los grandes, los que han aportado a la ciudad con su arte y han llegado a la senectud mueren solos, sin honores, como si nunca hubiesen existido o ¿nunca existieron?. Yo sé que siempre exististe, reclamaste por tus derechos, por el respeto al arte, por la disciplina, por la entrega.
Fuiste amiga de todos los artistas locales, formaste a tantos pianistas y músicos iquiqueños, trabajaste por años en la Escuela Artística, en el Teatro Municipal, en la Escuela de Arte de la Unap. Tuviste cientos de alumnos particulares estirando y flexibilizando dedos. Compartiste en coros, ballet, orquestas, obras de teatro. Incluso actuaste con Jaime Torres, hiciste la música para “Las Pildoritas Mágicas de la Bisabuela”, acompañaste a grupos de bailes, conjuntos folclóricos en giras nacionales e internacionales.
Fuiste Reina de la Primavera, hermosa, la Elizabeth Taylor iquiqueña, elegante, distinguida. Viajaste por el mundo, ayudaste a que tus hijas tuvieran las profesiones que ellas quisieran, fuiste la tía de míticos luchadores y desaparecidos en la dictadura. Fuiste profesora de tantas escuelas. También fuiste formadora de formadores. Profesora normalista, jubilada.
Nosotros, los teatristas del antiguo TIUN, no te olvidamos y te devolvemos la mano con las bellas letras que Guillermo Jorquera escribió para ti y repartía en el UPA al Teatro a quienes te conocíamos.
Porque fuiste parte de nosotros, de nuestras “Crónicas Teatrales” debemos despedirte con un fuerte aplauso final. ¡Gracias Teresa!.
Como siempre, los grandes, los que han aportado a la ciudad con su arte y han llegado a la senectud mueren solos, sin honores, como si nunca hubiesen existido o ¿nunca existieron?. Yo sé que siempre exististe, reclamaste por tus derechos, por el respeto al arte, por la disciplina, por la entrega.
Fuiste amiga de todos los artistas locales, formaste a tantos pianistas y músicos iquiqueños, trabajaste por años en la Escuela Artística, en el Teatro Municipal, en la Escuela de Arte de la Unap. Tuviste cientos de alumnos particulares estirando y flexibilizando dedos. Compartiste en coros, ballet, orquestas, obras de teatro. Incluso actuaste con Jaime Torres, hiciste la música para “Las Pildoritas Mágicas de la Bisabuela”, acompañaste a grupos de bailes, conjuntos folclóricos en giras nacionales e internacionales.
Fuiste Reina de la Primavera, hermosa, la Elizabeth Taylor iquiqueña, elegante, distinguida. Viajaste por el mundo, ayudaste a que tus hijas tuvieran las profesiones que ellas quisieran, fuiste la tía de míticos luchadores y desaparecidos en la dictadura. Fuiste profesora de tantas escuelas. También fuiste formadora de formadores. Profesora normalista, jubilada.
Nosotros, los teatristas del antiguo TIUN, no te olvidamos y te devolvemos la mano con las bellas letras que Guillermo Jorquera escribió para ti y repartía en el UPA al Teatro a quienes te conocíamos.
Porque fuiste parte de nosotros, de nuestras “Crónicas Teatrales” debemos despedirte con un fuerte aplauso final. ¡Gracias Teresa!.
